Las cámaras digitales han supuesto un gran avance a la hora de sacar fotos, desde las instaladas en los teléfonos móviles hasta las cámaras réflex con objetivos intercambiables. Las ventajas son indiscutibles, la inmediatez en la revisión de la imagen conseguida, la posibilidad de compartirla en redes sociales y la distribución en múltiples soportes, la captura de gran cantidad de imágenes, las desventajas son simplemente la falta de conocimientos del usuario en el manejo de la cámara o de la tecnología de almacenamiento y clasificación.
Con tantas opciones en el mercado, muchas veces es difícil encontrar la cámara digital ideal. Para ayudar en la elección mostramos a continuación, diez consejos a tener en cuenta a la hora de comprar una cámara digital:
- Resolución. Medida en megapixeles indica el tamaño de la foto que una cámara digital es capaz de crear. Cuanto mayor es la cantidad de megapíxeles, mayor es la resolución de la fotografía creada. Aunque es una variable a tener en cuenta ha de estar relacionada con la calidad y tamaño de la lente y del sensor. Pero no te vuelvas muy loco, piensa cuántas fotos verás en la pantalla y cuántas revelarás en papel o llevaras a álbum impreso. Eso significa que para hacer copias necesitarás imágenes de más calidad, 6 Megapixeles, por ejemplo, que si sólo vas a verlas en el ordenador o la TV.
- Zoom. Existen dos tipos de zoom: el óptico y el digital. Es preferible el primero, pues el zoom óptico realiza la aproximación de la imagen a través del lente. El zoom digital, por su parte, "amplía" la parte de la imagen original escogida, haciendo que se pierda la calidad de la imagen. La capacidad del zoom es medida de la siguiente forma: si una cámara indica zoom (sea óptico o digital) de 3x, significa que la imagen puede ser aproximada en hasta tres veces el tamaño original.
- Flash. El buen uso del flash permite sacar buenas fotografías en ambientes poco iluminados. El flash es importantísimo para que las imágenes generadas en ambiente con deficiencia de luz tengan buena calidad. Lo cierto es que se recomienda usar flash incluso en ambientes que cuentan con iluminación satisfactoria. Puedes eligir los modelos que permiten hacer pre-ajustes en el flash. Por ejemplo, hay cámaras que optimizan la intensidad del flash para evitar el efecto de " ojos rojos" en las imágenes. Otras permiten que la luz emitida "dure" más tiempo, característica útil en fotos secuenciales. Para uso nocturno, es recomendable tener un modelo que permita sincronizaciones lentas o la conexión de un flash externo.
- Formas de Almacenamiento. La gran mayoría de las cámaras fotográficas digitales hace uso de memoria Flash para almacenar las imágenes. Para eso, existen varios formatos de tarjetas de memoria. Es importante estar atento: la compatibilidad de tarjetas varía según el fabricante y el modelo de la cámara. Por ejemplo Sony, en sus equipos, utiliza el tipo MemoryStick. Aunque las tarjetas de memoria estén volviéndose más baratas con el paso del tiempo, elije cámaras que también posean memoria interna, aunque de poca capacidad. Eso evita que la cámara quede inutilizable en caso de pérdida de la tarjeta.
- Cámara de fotos con video o cámara de video con fotos. La mayoría de las cámaras digitales permite la creación de vídeos cortos, aunque de una calidad inferior a la de una videocámara. Este recurso es muy interesante cuando estés presenciando un acontecimiento que quedaría mejor registrado si es grabado, los primeros pasos de tu bebé, por ejemplo. Por eso, elije cámaras que posean el recurso de grabación de video, pero ten cuidado con un detalle: no es raro encontrar modelos que hacen películas, sin embargo sin audio. Elije las cámaras que permiten reproducir el audio de una película, pues eso, en algunos casos, indica también que la máquina puede ser usada como grabador de voz.
- Batería. La mayoría de las cámaras digitales utiliza pilas AA o AAA como fuente de energía. Es mejor escoger los modelos que usan el primer tipo (AA), pues estas pilas almacenan más energía y generalmente son usadas en pares (mientras que las pilas AAA suelen ser usadas en dos pares). Para evitar gastos, compra un cargador con pilas recargables, pero toma las siguientes precauciones: - Usa pilas originales e iguales, para evitar daños a la cámara; - No dejes las pilas y tu cámara expuestas al calor, para evitar fuga de energía; - Al dejar la cámara fuera de uso por más de una semana, quita las pilas y almacénalas en un lugar seguro, protegido del calor; - Si una pila presenta signos de fuga o avería, no la utilices.
- Exposición. Las cámaras digitales son capaces de ofrecer configuraciones automáticas, así el usuario no encuentra dificultades al sacar fotos. Sin embargo, hay casos en que es necesario generar fotografías más complejas, por ejemplo, cuando alguien posa frente a una avenida y quieres que los coches aparezcan como manchas luminosas que den la sensación de movimiento. Para estos casos, es preferible el uso de cámaras que permitan ajustes manuales en los parámetros de exposición, en especial, en la velocidad del obturador (en pocas palabras, el mecanismo que permite la captura de la luz para la generación de la imagen). El control de la exposición permite el control de la sensación de movimiento.
- Pantalla LCD. Otra gran ventaja de las cámaras digitales es la posibilidad de usar una pantalla LCD para sacar y visualizar las fotografías; por lo tanto, éste es un ítem imprescindible. Para el uso más confortable, elije los modelos que cuenten con pantalla LCD de, por lo menos, 1,8". Además de eso, asegúrate de que la cámara tenga la opción de desconectar esa pantalla, recurso útil cuando no se tenga mucha batería. Es una buena idea probar este recurso al momento de la compra, si es posible, para ver si la nitidez es satisfactoria y para chequear si la visualización no se ve perjudicada en ambientes con iluminación más baja.
- Tiempo entre los disparos. Si tuvieras que sacar fotografias en un ambiente con muchas acciones, puedes perderte alguna foto interesante cuando tengas que esperar que la cámara esté lista para un nuevo disparo. Por eso, observa en los modelos de tu interés, cual es el intervalo que la cámara ofrece entre una foto y otra. Cuanto menor es ese tiempo, mejor. Un consejo interesante es verificar si la cámara posee un temporizador que permite que la fotografía sea sacada algunos segundos después de apretar el botón de disparo. Así, puedes, por ejemplo, dejar la cámara en una mesa, accionarla y correr para salir en la fotografía junto a tus amigos (de ahí la necesidad de la cámara de "esperar" algunos segundos). Con eso, la cámara saca una fotografía sin que ninguna persona deba quedarse afuera, automáticamente.
- Cuidado con la marca (y con el modelo). Con el paso del tiempo, las cámaras digitales se han vuelto cada vez más baratas, pero aun así tienen un precio elevado para muchos bolsillos. Eso lleva a muchas personas a comprar cámaras demasiado baratas, de marcas desconocidas. Aquí no hay secreto: elije los modelos de marcas más conocidas, especialmente de aquellas que trabajan en fotografía hace ya algún tiempo. Las cámaras de marca desconocida pueden ser máquinas de calidad, pero no es habitual. De hecho, es bueno estar atento incluso con las marcas conocidas. Una buena idea es hacer una investigación y seleccionar los modelos que más te atraen para, enseguida, hacer una búsqueda en internet por cada máquina. Muchas webs y foros de discusión muestran las experiencias que otras personas tuvieron con tales modelos. Es mejor, claro, elegir aquellas cámaras de las que "se habla bien".
Para terminar
Después de comprar tu cámara digital, tal vez quieras conocer una manera eficiente de organizar y compartir tus fotos. Una buena idea es hacer uso de webs como el Flickr, además de almacenar tus fotos on-line, también puedes organizarlas para encontrarlas fácilmente en DVD´s o discos multimedia.
Texto de
www.informatica-hoy.com.ar revisado por A.R.
